Todo esto pudo evitarse si tan solo ocuparan un minuto de su tiempo mirándose al espejo.
Muchas veces suele pasar que por querer hacer menos hacemos más y por querer resaltar o pensar que estamos imponiendo una nueva moda.
No nos damos cuenta que lo único que se está imponiendo son sus sustos y pesares. Sí, es verdad.
Cada uno es libre de hacer lo que quiera, pero es que estos son casos extremos.
Ya veremos cuando te cruces con uno de estos personajes por la calle a ver si no le pones cara de sorpresa y mucho dolor.
Simplemente porque NO se vieron en el espejo antes de salir. ¡Que alguien los ayude!, echa un vistazo a continuación:
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