Las papas son ricas en varios micronutrientes, especialmente en vitamina C, la cual ayuda a prevenir resfriados, según los especialistas de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
La papa también es una fuente moderada de hierro, vitaminas B1, B3, B6, y minerales como potasio, fósforo y magnesio, los cuales ayudan al cuerpo a contrarrestar los efectos nocivos del sodio sobre la presión arterial y favorecen la eliminación de líquidos, actuando como diuréticos, agrega la FAO.
El jugo de la papa también es eficaz en el tratamiento de migrañas y estreñimiento, y ayuda a prevenir la presencia de hemorroides.
Sumado a los beneficios que aporta la papa, beber su jugo puede ayudar a reducir la presión arterial, debido a que este tubérculo contiene una gran cantidad de potasio.
Además, el jugo de papa se utiliza para tratar irritaciones de la piel, debido a que la papa tiene grandes propiedades calmantes, antiirritantes y desinflamatorias.
Por ello, se utiliza en el tratamiento de erupciones, quemaduras e irritaciones, agrega el Consorcio Papa Chile.
Para poder preparar jugo de papa es necesario lavar y desinfectar correctamente dos papas. Posteriormente, se deberán introducir en un extractor.
De esta manera se obtendrá el jugo de papa. Lo recomendable es beberlo solo, pero, en caso de que la consistencia sea muy espesa, se puede agregar medio vaso de agua a la mezcla.
