Fibromialgia: La enfermedad de las emociones no expresadas

La popular arquitecta Mª Àngels Mestre sufría de fibromialgia y salió de ella por su cuenta. Desde entonces se ha dedicado a escribir sobre el tema y asesorar a pacientes con esta y otras enfermedades crónicas.

La fibromialgia es conocida como la enfermedad de las emociones no expresadas.

Regula la fascia, los músculos, los tendones, los ligamentos, las articulaciones, los conductos venosos y arteriales, así como la visión. Este órgano también se encarga de desintoxicar todas las toxinas que nos enferman por fuera y por dentro.

La fibromialgia tiene una amplia gama de síntomas, con el problema principal dolor musculoesquelético generalizado con rigidez y fatiga asociado con disminución de la concentración y la memoria, insomnio, síndrome del intestino enojado, vejiga enojada, dolor de cabeza, ansiedad, dolor en piernas y pecho inquieto, períodos severos y dolorosos , visión borrosa, calambres, etc.

Para lograr salud y armonía, debemos coordinar pensamiento, sentimiento (emociones) y acción (acción/palabra). En la fibromialgia, los pensamientos y las emociones no se manejan bien porque su energía no se puede liberar a través de acciones o palabras. La acción se suprime y la energía del pensamiento y las emociones se bloquea en forma de tensión, que se manifiesta por dolor y diversos síntomas.

Como todas las enfermedades, la fibromialgia es multifacética, pero sus raíces se encuentran en patrones culturales, familiares y sociales rígidos, factores que conducen a la depresión infantil. El niño copia estos patrones para sentirse amado, se vuelve obediente y sumiso sin ser, y comienza a desarrollar una falsa personalidad al liberarse de su ser. Los defectos psicoemocionales que acompañan al paciente son: orgullo perfeccionista, sentirse valorado por el entorno y contener la ira, emoción que, si no se libera, destruye la salud.

Puede restaurar su salud si esa es nuestra voluntad. Tenemos la información necesaria y estamos dispuestos a cambiar la naturaleza global de las personas. Necesitamos un gran cambio en nuestra forma de pensar, sentir y actuar que produzca una nueva persona sana, libre y feliz.

La estimulación transcraneal se basa en la producción de corriente eléctrica en áreas del cerebro. Sabemos que la corriente eléctrica genera campos electromagnéticos, así que creo que este no es el método más adecuado para la fibromialgia.

Si queremos aumentar los neurotransmisores como la serotonina y la melatonina, tenemos herramientas menos invasivas, como la comida, el primer remedio. Para aumentar el nivel de neurotransmisores, recomiendo frijoles que contienen triptófano porque son inductores de estos neurotransmisores.

Para curar necesitamos los siguientes cambios: el cambio de actitud hace que dejemos de sentir que las víctimas se vuelven responsables, de

jemos de ser pasivos para ser activos, comenzando a autogestión de enfermedades autorizando al protagonista. No esperemos que nos sanen, se necesita algo de inconformidad y rebelión para tomar nuestras propias decisiones y dirigir nuestras vidas.

También necesitamos una forma de vida para cambiar, simplificarla y dejar atrás el estrés. También es necesario reemplazar los patrones establecidos por nuestra experiencia vivida y entendida que nos ayudarán a decir ‘no” sin sentirnos culpables.

No. Las enfermedades nacen de los defectos psicoemocionales de la humanidad, pero aumentan y empeoran el estilo de vida y la mala alimentación.

Hoy en día esta enfermedad se ha extendido debido a la autoexigencia que las mujeres se han obligado a sí mismas para llegar a todos los ámbitos que les muestra la vida moderna, como el trabajo profesional, la familia, el hogar, las relaciones sociales, etc. Todo esto, muchas veces, sin posibilidad de dirigir su vida.

A continuación verá un vídeo con las informaciones más detallas:

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