Desayuno
Un café con leche.
Una rebanada de pan con aceite de oliva.
Un vaso de zumo de naranja natural.
Aperitivo
Una pieza de fruta.
Comida
Lentejas guisadas.
Albóndigas con guisantes y zanahoria.
Fresas con nata.
Merienda
Queso fresco con miel.
Cena
Ensalada mixta.
Pescado al horno con patata asada.
Un yogurt.
Los alimentos poco procesados, frescos y de temporada son los más adecuados. Es importante aprovechar los productos de temporada ya que, sobre todo en el caso de las frutas y verduras