El traumatólogo y analista de ESPN, Gerardo Meraz, señala que la muerte del Hijo del Perro Aguayo fue instantánea al chocar contra las cuerdas del ring donde luchaba.
«En el momento en el que le dan la patada entre el cuello y el hombre lo agarran ‘flojo’, no estaba apoyado, y en ese momento todo su cuerpo se va hacia las cuerdas, pero hace una palanca y el cuello hace un «latigazo» lateral y rotación y probablemente una de las cervicales 1, 2 o 3 se luxa y sale de su lugar y es ahí en donde probablemente pierde la vida. Los brazos quedan colgados y es una muerte instantánea; se desnucó«.
Añadió: «Lo más probable es que se haya luxado una de las vértebras y le haya seccionado la médula».
Se reporta que de haber sobrevivido, es muy probable que Pedro quedara cuadrapléjico.
Meraz señala que desde que colgó de las cuerdas se debió tomar medidas extremas, «como bajarlo con extremo cuidado, evitando que se moviera el cuello y ponerle un collarín para llevarlo de inmediato al hospital».
DESCARTAN NEGLIGENCIA
El médico que atendió al Perro Aguayo Jr., Ernesto Franco, negó rotundamente que haya existido negligencia en el caso.
Aseguró que contaban con dos ambulancias:
«De hecho teníamos dos ambulancias, en el momento que a mí me hablan estábamos atendiendo a otros dos muchachos en los vestidores. Estaba otro muchacho lesionado de las vértebras lumbares, pero no obstante eso se le dio la atención inmediata, si se le sacó en un triplay fue por cuestión práctica porque lo teníamos ahí a la mano y lo que queríamos era rapidez, ya en el túnel lo cambiamos a la camilla para llevarlo a la ambulancia», recordó Ernesto Franco.
También Mario Orozco, el doctor especialista en ortopedia y que era médico particular del Hijo del Perro Aguayo, ofreció una conferencia de prensa en la funeraria.
“En uno se ve que Pedro subió en excelentes condiciones, se le veía coordinado, que manejaba la situación tal como él acostumbraba cada vez que subía, y en el video titulado en YouTube «Rey Mysterio va», y no hay nada de que si Rey le dio unas patadas en la nuca, se las da en el hombro; segundo, cuando Pedro se recarga en las cuerdas ya estaba inconsciente o en estado de Glasgow, ya no respondía a estímulos verbales, no tenía los ojos abiertos, y no respondía a los estímulos dolorosos, su garganta estaba recargada sobre las cuerdas y eso es asfixiante”, agregó.
