APOPO es una ONG de Bélgica que se encarga de entrenar ratas que llevan a cabo una misión peligrosa para los seres humanos: la detección de minas antipersonas.
Las ratas son animales muy inteligentes, así que no es ninguna sorpresa que puedan recibir entrenamiento para detectar explosivos subterráneos.
Fabricar una mina antipersona cuesta sólo 3 dólares, pero el proceso de detectarla, desactivarla y retirarla cuesta unos 1000, ya que un humano se tarda unas 25 horas en desminar unos 200 metros cuadrados.
Sin embargo, las ratas entrenadas pueden realizar ese mismo trabajo en sólo 20 minutos. Cada mina se activa con 5kg de peso, pero las ratas sólo pesan 1,5kg, por lo que su peso no hace estallar las minas.
Las minas terrestres son explosivos terroríficos que causan horribles lesiones, amputaciones y muertes. Se estima que cada día unas 9 personas mueren en el mundo a causa de estas minas.
Gracias al excelente olfato que tienen y a su bajo peso, las ratas detectan las minas sin peligro y le avisan a su entrenador cuando encuentran una. Así el especialista puede ubicar la mina, desactivarla y destruirla sin problema.
El programa comenzó en 1997, y desde entonces ninguna rata ha resultado dañada. Cuando las ratas envejecen, van a un centro de cuidado donde se les alimenta hasta sus últimos días.
En África, las ratas también son entrenadas por APOPO para detectar muestras de esputo más rápida y eficientemente, ayudando en la detección y control de la tuberculosis, una enfermedad altamente contagiosa.
En sólo 10 minutos, una rata puede evaluar más muestras que un bioanalista en todo un día de trabajo.
En Tanzania, las ratas han ayudado a retirar 1.500 minas. En Mozambique detectaron 13.273 minas, 28.792 armas y municiones y 1.113 bombas, las cuales fueron desactivadas y destruidas.
Las ratas de esta ONG han hecho el mismo trabajo en otros países afectados por largos y crueles conflictos armados, como Camboya, Tailandia, Angola, Vietnam y Laos.
Pero el entrenamiento de estos útiles roedores no es tan sencillo, se tarda unos cuantos meses y para eso se necesitan recursos. Por eso la ONG APOPO está constantemente recaudando fondos.
Como ves, las ratas también pueden llegar a ser animalitos muy útiles para los seres humanos. Con el correcto entrenamiento, un esmerado cuidado y la correspondiente retribución, estos roedores le prestan un gran servicio a la humanidad. ¿Qué te parece el trabajo de estos amiguitos? ¿No te hizo cambiar tu opinión acerca de las ratas? Coméntanos, y comparte este artículo con tus amigos a través de las redes sociales. ¡Que vivan las ratas!